Cartas a Mr. Pupa (IV)

San Cristóbal, 07 de marzo de 2.017

Y siguen pasando los días...

Siguen pasando para Mr Pupa y Madame Lilí, y les hacen felices las horas donde derrochan fantasías; correr campos elíseos querrían pues que lugar delicioso sería, para los amantes que soñarían sentir sus cuerpos tal vez un día.
Les hacen feliz las horas cada vez que amanece el día, no importa lo diferente que nazca el sol en sus vidas.
Que sueños los que soñamos, en cuerpos desconocidos, parece que se encontraran, todas las noches al caer el día.

Mr Pupa, ¿usted que sueña? Madame Lilí saber quisiera, sus ojos la ven tan linda, la describe cual poesía; que bellos ojos posee que recrean maravillas.

Usted le enseña su mundo y Madame soñar podría, en ibéricas tierras que un día, en sus libros ella leía. Con Quijotes ha soñado, y de reyes se acordaría, de Felipe el hermoso ha leído, así como de Enrique VIII y sus amantes las Bolenas y que a una de ellas en reina convertiría.

Europa la de ese mapa, que se enseña en geografía; sigue tan lejos ahora como a Cristóbal Colón le parecía. Madame conoció su hidalgo, en Valladolid este vivía, porqué se encuentra tan lejos, ella bien no lo sabía, hay cosas que no se explica porque se juntan tardías.

Mr Pupa no conoce, los Andes donde ella vivía, que de montañas rodeada Madame vive día a día; hay campos donde se siembra lo que la tierra buen sustento daría, hay flores, hay aromas que en España nunca nunca habrán de oler sus campiñas; se ordeña con tradición y el becerrero llama temprano a las reses, los quesos que ya se cuajan son de sabor tan divino; café que huele a molienda de cuatro de la mañana, se oye fiel melodía llamando al lucero de la mañana, para que preste su claridad, para alumbrarle los pasos a su amante que se va...

Madame es criolla mestiza, Mr Pupa de hidalgas tierras venía; cómo pudieron dos mundos, tan distintos juntarse un día.

Atte.
Su Madame Lilí