miércoles, 19 de enero de 2022

El vuelo de las gaviotas que no son golondrinas...

 

Gaviotas al amanecer despuntan entre nuestras sórdidas caricias, las golondrinas aún no han hecho verano en nuestro idílico puerto y es difícil encontrar un nido parecido a éste; donde su cuerpo y el mío forman una coraza de sentimientos.

jueves, 16 de septiembre de 2021

Plagio...

 

Confieso que he plagiado su mirada en mis ojos, la libertad de su ser y la sencillez al compartir la tierra que camina...

martes, 29 de junio de 2021

Te he visto pasar tantas veces...


Te diré que te he visto pasar tantas veces y ni una sola te quedaste... 

La sonrisa de ayer se fue con aquel motivo, los ojos que vieron aquel atardecer nunca pintaron los mismo colores en la paleta de su iris, la textura de  la piel no estaba igual al deslizar la crema día día...

lunes, 15 de marzo de 2021

Hay monstruos que llegan para quedarse...


Mirando sus ojos observé un mundo que duele, un mundo que no escogió, un mundo sin sentido ni porqué...

Su piel sigue siendo hermosa para quien el alma aún tiene la fortuna de ver más allá de lo fútil ...

sábado, 20 de febrero de 2021

Tengo una relación...


Tengo una relación estrecha con el aire que respiro pues sin el no podría vivir...

Tengo una relación sentida con mis pasos al caminar cada día pues me permiten recorrer una y otra vez lo diverso de lo cotidiano...

miércoles, 27 de enero de 2021

Nos enamoramos de lo perfecto para terminar amando la imperfección...


Me he dado cuenta que siempre vamos a ser algo maravilloso para alguien pero también en algún momento nos convertimos en algo que se llena de defectos para el otro...

lunes, 11 de enero de 2021

Las cajitas de hormigas...


Esta mañana mientras tomaba mi café bastante cavilante en asuntos que ni siquiera debería contemplar, vino a mi mente un recuerdo de mi infancia bastante particular y es que el motivo también lo fue ya que una pequeña hormiga recorría mi brazo izquierdo mientras yo me encontraba absorta en mi café y las tontas cavilaciones.

Recordé que muy pequeña, la verdad no sé que edad tenía para ese momento, quizá unos 5 o 6 años que son desde ahí que alcanzo a traer recuerdos de mi niñez; el caso es que al ver la pequeña hormiga en mi brazo y desde luego sacudirla comenzó a desplegarse en mi mente aquella tan nítida visión.

Crecí junto a mi madre en la casa de mis abuelos maternos, ellos tenían una bodega en casa y yo disfrutaba viendo aquel mundo para mí alucinante de estantes abarrotados de productos y enseres, vitrinas muy llenas de chucherías y también una donde mi nona (así les llame siempre... Nona y Nono, a mis abuelitos) guardaba todo lo relacionado con mercería; allí había algo a lo que siempre ponía mucha atención, eran unas cajitas transparentes donde venían muchos hilos de todos colores y que cuando mi nona los vendía todos esas cajitas quedaban vacías y yo esperaba ansiosa pues dichas cajitas iban a parar a mis manos.

El caso es que tomaba aquellas cajitas transparentes que incluso tenían su tapa igualmente transparente y me iba corriendo a la escalera que daba al segundo piso de la casa porque allí en la pared había usualmente un caminito de hormigas subiendo sin parar a no sé dónde, las cuales me causaban gran curiosidad; era así como llegaba con mi cajita y rompía aquella columna perfecta de las pequeñas caminantes incansables y zas!!! las atrapaba en mi cajita poniendo esta bocabajo, así me quedaba horas y horas mirando como corrían en muchas direcciones dentro de la cajita buscando una salida.

No sé cuál era mi fascinación por semejante acto que aunque en el momento no lo comprendía era algo no muy bueno.

Me fascinaba jugar con las pobres hormigas atrapándolas y poniéndolas a mi disposición hasta que mi madre me llamaba la atención y me decía deja ya esas pobres hormigas quietas.

El porqué de este recuerdo particularmente en este momento no lo sé o tal vez sí... 

Pero he llegado a la conclusión que a veces sin quererlo encasillamos momentos, personas, situaciones, a nuestro antojo; sin pensar que realmente queremos cambiar de manera poco natural su normal influjo, que podemos matar poco a poco lo que realmente caracteriza a cada ser, sin querer ver que lo primordial de cada actuación es permitir la libertad en todos sus aspectos. 

Cada uno tiene un camino, una razón de ser y estar, pero tantas veces nuestro egoísmo en querer retener algo nos impide ver lo maravilloso que es ver las hormigas correr a su destino.

Posdata

Algo he aprendido, tanto que ahora las hormigas corren libres incluso en mi brazo... Sí, aún vuelven a mí... Es que un día las dejé libres... De escoger, sí

sábado, 9 de enero de 2021

Sinsabores


Tengo la terrible costumbre de sentir como humana, lo confieso...

A veces me convierto en un jilguero que quiere alcanzar las nubes sin pensar que si vuelas demasiado alto puede hacer mucho frío o el sol abrasador puede quemar tus alas...

A veces quiero ver sin ojos y los matices de un mundo que desconozco terminan por derretir las retinas que nunca he tenido...

A veces me convierto en golondrina y emigro a parajes que no están a mi alcance y sencillamente me pierdo en el mundo que no fue hecho para mí...

A veces me empalago de los días con sentido ajeno y descubro que soy un cuento donde el sabor aún no llega...

A veces soy un suspiro y salgo demasiado rápido sin pensar que soy solo aire que se expulsa en solo una ilusión...

A veces me vuelvo desilusión y los torrentes de un río encastado en lo profundo de mi alma se desborda y corre veloz inundando todo a su paso...

A veces me vuelvo infantil y recuerdo que soy una mujer muy chica que no ha aprendido a crecer...

A veces olvido que el mundo no me pertenece y no soy una jugosa manzana que puede dar fragancia en el prado de un campo sin nombre...

A veces me vuelvo nieve, pero que tonta soy porque no conozco lo blanco de su gélida textura...

A veces soy un poema que nunca ha tenido sentido o quizá no solo a veces, sino siempre, soy una rima que jamás se escribió...

A veces no siento el sabor de los vientos que soplan en mi piel y me vuelvo arena que simplemente se desaparece en un soplido...

A veces sueño y olvidó que mi vida no consiste en despertar, sino más bien en seguir dormida creyendo en un mañana...

A veces no quiero levantar la vista a la realidad de sentir, porque sentir es como mil caballos arrastrando tu cuerpo en escape brioso...

A veces me cuento a mí misma que existe un mundo donde Alicia en el país de las maravillas es real y donde Macondo aún se sigue sucediendo una y otra vez en cien años de soledad...

A veces miro el mapa y siento la necesidad de borrar algunas geografías y convertir todo en un mar de posibles destinos...

A veces el alma la siento tan cansada que se inunda de un mar salado inmenso y ahí me doy cuenta que no hay tierra disponible para llegar a un puerto...

A veces los sinsabores no lo son, porque aquí los siento salados, amargos, con sabor metálico y se escurren en la garganta hasta llegar a un hondo mar en donde volverán a encontrar un camino para volver a ser horizonte posible...

A veces me hundo porque así es la vida...

A veces respiro pesares y exhalo largos e imposibles sueños...

A veces, a veces, siento que sigo viva pero sin darme cuenta que nunca he salido de mi cuento...

A veces llegan a mi vida inciertos sabores que se van tornando apetitosos bocados y luego son como agua clara, cristalina, sin olor ni sabor definido, solo corren en declive para nunca más volver...

Sinsabores...

Por Lilian sí...

L.J.A


lunes, 7 de septiembre de 2020

Mi Credo...

Creo en el mundo que fue hecho para nosotros por un Padre  amoroso y sensible, de misericordia infinita

Creo en cada mañana que despierta para convertirse en día

Creo en lo oculto de un paisaje que nadie aprecia 

Creo en el amor que se siente en el pecho y te desgarra los sentidos en miles de partículas que se adhieren a lo amado

viernes, 21 de agosto de 2020

Cartas a Mr. Pupa (VI)


San Cristóbal, 10 de marzo de 2017

La luna sueña desiertos...

¿Sabía Ud que la luna sueña desiertos? Muy cierto ha de ser sí, pues en pleno desierto se siente quizá amada, cuando se extiende con su reflejo sobre lienzos de arena dorada. 

Madame Lilí le ha contado, a Mr Pupa de una rosa, que también alumbra la luna en bellos desiertos de ensueños; soñando va esa rosa, la rosa de los desiertos; Desert rose se llama ésta y con ser mujer ha soñado, le contemplan las estrellas bailando al son de los ojos que esperan tal vez su aroma.

miércoles, 12 de agosto de 2020

Aromas álgidos...

 
Desnuda frente al espejo escruta su piel serena al despuntar el nuevo día, aún es temprano y la ducha le espera sonando copiosamente mientras su cuerpo le intriga ante el aroma que expide, aromas tan suyos imposibles de recrear por ningún medio artificial; acaso las personas no pueden oler su verdadera esencia en cada bocanada de salvaje almizcle propio de su naturaleza...

jueves, 25 de junio de 2020

Por tu culpa, por tu culpa, por tu bendita culpa...


Por tu culpa me vuelvo marea y me acerco a tu blanca orilla y me conviertes en camelia buscando solo el placer de tu humedad, por tu culpa me he vuelto cera que se derrite sin comprender el porqué y aún siendo de aire la piel siempre me ha de escoser...

lunes, 22 de junio de 2020

Cartas a Mr. Pupa (V)


 
San Cristóbal, 09 de marzo de 2017

Mundos distintos, vidas distintas...

Hay dos mundos diferentes que contarles muy bien pueden, realidades tan diversas como estrellas tiene el firmamento.

Mr Pupa es tan bueno con Madame Lilí, es tan dulce como arequipe y tan sereno como las noches de grillos cantando alrededor de la ventana, a la luz de una luna que a los dos les alumbra.

lunes, 8 de junio de 2020

Ristras de una mañana enamorada...


Me gusta mucho cuando me piensas y me bañas de deseos, siento tus labios en mis turgentes senos mis pezones buscan álgidos tu boca. Te deseo como al verano después de un invierno cruel; deseo tus labios succionar mis pezones y tú te vuelves loco en mí, me tomas suave con tus dedos en mi cabello, me miras a los ojos y vas entrando en mí como las horas inesperadas, como un vacío que llega de repente para volverse un todo en mi interior, te vuelves líquido en mis entrañas y sientes el vibrar de mi cuerpo en escape a ese mundo que tú le ofreces.

domingo, 7 de junio de 2020

Y sí, huele a sexo!

Un cuento contarle quiero, que de tierras calientes viene...
Los suspiros comienzan suaves para luego convertirse en gimientes...
Que la piel me la ha erizado eso se oye y se siente, en el centro de mis templanzas  donde ya pellizco fuerte, las puntas que usted quiere, morder con furia latente...

viernes, 15 de mayo de 2020

No, no soy como tú...

No, no soy como tú; soy etérea, volátil, incandescente y a veces opaca, voluble, maleable, irascible, insondable, tersa y tan de explosiones nucleares, tan suave como una obertura, pero tan ruda como los metales, soy argón, soy aire, me convierto en fuego si me profanas,
soy una reacción química en el agua, un pequeño volcán que a veces escupe lava, soy una maldita perra que te roe las entrañas, soy el lago de los cisnes pero sin tonada, soy lo que a veces respiras pero otras te corta las alas, soy el sueño de tus mañanas pero la pesadilla que de noche corre somnolienta cerca de tu cama, soy la ternura que rompiste y luego engulliste lleno de apetito insaciable, soy la culpable de tus orgasmos y de que te rompa en mil añicos las ganas que ya no siento, cuando te vuelves solo carne...

domingo, 3 de noviembre de 2019

El manzano de los deseos fúlgidos


Suelen las manzanas ser apetitosas, mas aun cuando son de color rojo.
Soñé un árbol que de manzanas refulgente se balanceaba, de color amarillo y rojo sus frutos palpitantes a mis ojos saltaban insinuantes; palpitaban sí, tan redondas y coloridas las manzanas que hambre causarme podían.

sábado, 2 de noviembre de 2019

Que difícil vivir sin estar vivo...


Que difícil resulta a las almas habitar espacios vacíos... Vacíos de tanto calor que otrora sintieran, pasar desapercibidos y ser solo fantasmas de una vivencia que se convirtió en pasado y peor aun ya no recordado...

martes, 29 de octubre de 2019

Sin Sexo en el Calendario


Vaya si somos seres sexuales que todo lo que tenga un cartel de sexo somos capaz de verlo: de reojo para los recatados, de frente para los más osados, de escondidas para los agazapados; porque sí, todos ven la cosa y cada uno lo ve desde su punto de vista cachondo.

domingo, 27 de octubre de 2019

De Sentimientos Caducos...

Acaso caducan los sentimientos???

Tal vez se duerman un rato o quizá una temporada o tal vez esto va de años. Y no! No es el paso del tiempo sino el uso que les damos...

Aquí no aplica aquello de si les das mucho uso se desgastan, no... Aquí lo que sucede es mas bien todo lo contrario, si no les das uso frecuentemente terminan apagándose y volviéndose mas bien un sin sentido.

lunes, 26 de agosto de 2019

Encuerados y al Acecho!!!


  




Sonrío cada vez que el calor acude sin permiso a tus mejillas , se que el fuego de tu poco atrevimiento esconde un pillo...
Se que estas ahí sí, encuerado y al acecho...

viernes, 26 de julio de 2019

Y te preguntas... Dónde está?

Porqué el libro... 

Pues tu hiciste que llegará a mí, como un hurto por casualidad...

Dedicado... A tus desmemoriadas neuronas; en un tiempo cualquiera en tierras de nuestro Señor...

Y te preguntas donde está aquella mujer que se trepaba en cada pliegue de tu piel.
Aquella mujer que se bebía tus antojos y los exhalaba en suspiros de ardiente lava sobre tu piel.
Dónde está esa mujer que lamía palmo a palmo de tus pasiones más ocultas, de tus pensamientos más procaces.

lunes, 22 de abril de 2019

Cartas a Mr. Pupa (IV)

San Cristóbal, 07 de marzo de 2.017

Y siguen pasando los días...


Siguen pasando para Mr Pupa y Madame Lilí, y les hacen felices las horas donde derrochan fantasías; correr campos elíseos querrían pues que lugar delicioso sería, para los amantes que soñarían sentir sus cuerpos tal vez un día.
Les hacen feliz las horas cada vez que amanece el día, no importa lo diferente que nazca el sol en sus vidas.
Que sueños los que soñamos, en cuerpos desconocidos, parece que se encontraran, todas las noches al caer el día.

jueves, 10 de enero de 2019

Cartas a Mr Pupa (III)








San Cristóbal, 06 de marzo de 2017 

Del Amor y otros demonios y un regalo dado, no recibido...

A Madame Lilí mucho le gusta leer, leer las palabras de Mr Pupa grato le sienta también. 
Pensando voy los momentos; Madame Lilí es tan ardiente, su alma siempre presiente historias que son lejanas, le cuentan que solo en letras tal vez sobrevivir pudieran. 

martes, 4 de diciembre de 2018

Cartas a Mr. Pupa (II)


                   San Cristóbal, 03 de marzo de 2017

   El encuentro de dos mundos y un ¿porqué?

De cómo se encontraron un día Mr. Pupa y Madame Lilí

Pensando voy estas horas, en las que  ya familiar le siento, en como surgió el encuentro de dos distancias ajenas.
Ajenos mundos tenemos, caminos que nunca vimos, sin embargo se les parecen las vidas cuando vivimos.

Madame Lilí que escribía, y unos cuantos le leían; tal vez ponía en palabras lo que el alma le decía, en uno de tantos días cuando aquello acontecía llegó de ibéricas tierras un lector que no preveía.

jueves, 29 de noviembre de 2018

Cartas a Mr. Pupa... (I)




 San Cristóbal 02 de marzo de 2017

Cartas al mar...

Bueno he decido enviar un email, como otrora se enviaran cartas a través del mar y como el asunto lo dice, son cartas, al menos dos habrán de ser.
No se porque viene a mi memoria el reflejo de unas manos que al son de las olas y el vaivén de los mares mecían bergantines en pluma de viajeros eternos.

miércoles, 28 de noviembre de 2018

Hay una rana en mi armario!



Todos tenemos un armario, donde guardamos nuestra ropa vieja, nuestra ropa nueva, los jeans favoritos, los bolsos de todos los colores para combinar con la ropa, miles de cinturones a juego con los zapatos, nuestros zapatos de invierno, de verano, de otoño, de primavera y de cualquier otra ocasión que se nos ocurra a nosotros que pueden existir un par de zapatos propicios. Sí, ese armario donde a veces no solo le cabe ropa y prendas de vestir, sino que además lo llenas con libros, medicinas, artículos de tocador y pare de contar; vaya que si tuviéramos la oportunidad de adentrarnos en muchos de ellos, entraríamos a un nuevo mundo como en el armario de las Crónicas de Narnia.